Estadística Teórica |
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La Real Orden del 29 de octubre de 1836 ordenaba el traslado de los estudios de Alcalá de Henares a Madrid. En un principio se denominó Universidad Literaria, pasando en 1851 a conocerse como Universidad Central o Universidad de Madrid.
En un primer momento, la Universidad Central se instaló en el edificio del Seminario de Nobles de la calle Princesa, esquina Serrano Jover. Posteriormente, la Universidad Central se instaló en el Convento de las Salesas Nuevas en la calle San Bernardo. - Las monjas tuvieron que mudarse en 1836 para recogerse en las Salesas Reales. - El Convento se convirtió en la Universidad de Madrid y su Iglesia en Paraninfo, hasta que en el solar del desaparecido Noviciado de los Jesuitas se construyó la Universidad Central, que abrió sus puertas en 1843, pudiendo volver las monjas a su Convento donde residen actualmente. Desde la Ley Moyano (17 de agosto de 1857, incorporando buena parte de la Ley de Instrucción Pública de 1855 elaborada por Manuel Alonso Martínez, Ministro de Fomento), la Universidad Central fue la única universidad autorizada en España para dar el título de doctor, hasta que en 1954 le fue concedida la potestad a la Universidad de Salamanca, pasando posteriormente al resto de universidades españolas. La Universidad Central, tras la desmantelación de la Universidad de Alcalá de Henares, durante le franquismo, tomó el nombre oficiosamente de Universidad Complutense de Madrid, y legalmente desde 1970, al fundarse la Universidad Autónoma de Madrid en 1968. |
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Cleopatra VII Filópator heredó el trono de Egipto en el año 51 a. JC, antes de cumplir los 18 años, en una época turbulenta y Egipto estaba amenazado por las legiones de Roma. Con su inteligencia, discutida belleza y su intuición política, la reina egipcia, de sangre macedonia, heredera de la Dinastía de los Ptolomeos, representó uno de los últimos intentos de Oriente, para hacer frente al joven y poderoso Imperio Romano. Así, se convirtió en amante de Julio César (con el que tuvo un hijo llamado Cesarión, pequeño César), y al que siguió a Roma para regresar a Egipto, después del asesinato del dictador, por su hijo adoptivo Bruto, en la conjura de los Idus de Marzo (15 de marzo del año 44 a. JC). También, Marco Antonio, al igual que Julio César, quedó fascinado por su conversación y encanto, según nos dice el relato del historiador romano Plutarco, y pasaron a convertirse en una de las parejas más famosas y apasionadas de la Historia Universal. Sin embargo, el destino les fue adverso y, después de la derrota de la flota egipcia de Cleopatra y Marco Antonio, ante el Imperator César Augusto, en la Batalla Naval de Actium (año 31 a. JC), seguido del suicidio de Marco Antonio. Cleopatra, prefirió también la muerte a la humillación. Según la historia-leyenda, Cleopatra se hizo morder un pecho por una víbora áspid en su palacio de Alejandría, tras su intento fallido de seducir al Imperator Augusto. |
La vida y el trágico fin de Cleopatra, símbolo de la astucia femenina, ha traído siempre a literatos y artistas; desde Boccaccio y Shakespeare, hasta Bernard Shaw y desde los pintores Miguel Ángel, Tiépolo, Gérôme, Makart, Alma-Tadema, etc. hasta los grandes productores cinematográficos. El Antiguo Egipto de los faraones, ha sido reiteradamente escogido por los más importantes realizadores cinematográficos de Hollywood como marco histórico para recrear los argumentos de sus películas. |
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